La senadora colombiana oficialista Zulema Jattin renunció este martes a su escaño en el Congreso, luego de que el lunes fuera detenida por orden de la Corte Suprema de Justicia que le imputa vínculos con grupos paramilitares de extrema derecha.
La renuncia fue aprobada por la mayoría de la plenaria del Senado.
Al dejar de pertenecer al Congreso, el proceso abierto contra Jattin por el máximo tribunal de la justicia colombiana pasa a ser competencia de la Fiscalía General, cuyos fallos pueden ser apelados, mientras los de la Corte no.
La estrategia judicial de la ahora ex senadora también la han seguido otros de sus colegas que han sido involucrados por la Corte dentro de una gran investigación sobre presuntos vínculos de congresistas con jefes de las ahora desmovilizadas Autodefensas Unidas de Colombia (AUC, extrema derecha).
Jattin, del partido de La U, fue vinculada con las AUC por Salvatore Mancuso, uno de sus ex jefes, en una audiencia ante la Corte a finales de octubre de 2007.
Las investigaciones de la Corte Suprema han llevado a la cárcel a una treintena de congresistas, de los cuales seis recuperaron la libertad
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